“Cuarta vía.
1.- Cuarta vía - La jerarquía de las cosas, argumento "De los Grados".
1.1.- Enunciación.
Pues
nos encontramos que la bondad, la veracidad, la nobleza y otros valores
se dan en las cosas. En unas más y en otras menos. Pero este más y este
menos se dice de las cosas en cuanto que se aproximan más o menos a lo
máximo. Así, caliente se dice de aquello que se aproxima más al máximo
calor. Hay algo, por tanto, que es muy veraz, muy bueno, muy noble; y,
en consecuencia, es el máximo ser; pues las cosas que son sumamente
verdaderas, son seres máximos, como se dice en II Metaphys. Como quiera
que en cualquier género, lo máximo se convierte en causa de lo que
pertenece a tal género -así el fuego, que es el máximo calor, es causa
de todos los calores, como se explica en el mismo libro —, del mismo
modo hay algo que en todos los seres es causa de su existir, de su
bondad, de cualquier otra perfección. Le llamamos Dios.
1.2.- Simplificación.
Las cosas tienen más o menos de una característica.
Ese "más o menos" indica que tienen grados.
Los grados de una cosa se miden en relación a un grado máximo.
Ese grado máximo es absoluto.
El grado máximo de una característica lo posee un ser que le otorga ese grado a toda cosa que tenga esa característica.
Hay un ser que posee el grado máximo de toda característica.
Ese ser es Dios.
2.- Refutaciones.
2.1.- Premisa 3 es arbitraria.
No
es cierto que todos los grados se midan en relación a un máximo, hay
grados que se miden a partir de un mínimo. Y ya que Aquino habla de
calor ese es un buen ejemplo de lo contrario: la temperatura absoluta se
mide a partir del cero absoluto (cero grados Kelvin).
2.2.- Premisa 4 es falsa.
Como
vimos en el punto anterior, el cero absoluto no es el máximo absoluto,
es justamente el mínimo. Por lo tanto la premisa 4 del argumento es
falsa. Pero resulta que además hay grados que maximizados nunca alcanzan
un máximo absoluto, el calor sigue siendo ejemplo de ello.
2.3.- Paso 5 es "non-sequitur".
Tomás
de Aquino comete una falacia non-sequitur, ya que algo sea un máximo de
una escala no se sigue que sea la causa de todas las cosas de esa
escala u orden. Por ejemplo, que una montaña tenga la máxima altura no
se sigue que sea la “causa” de todas las montañas o de las cosas con
altitud. Que una estrella tenga la máxima temperatura en su interior no
se sigue que sea la causa de todas las temperaturas o estrellas. El
ejemplo del aquinate sobre el fuego es improcedente, ya que éste no es
causa del calor o calores, sino los movimientos de partículas
subatómicas.
Con la misma argumentación, si existen elefantes de
diversos tamaños debería existir un elefante más grande que ningún otro
que sería el origen y la causa de la existencia de todos los elefantes
más pequeños que él.
2.4.- Paso 6 no se infiere de 5.
Debido a
que no todas las características de un objeto le son innatas en él sino
más bien porque surgen en él como resultado de los componentes que
forman tal objeto. Por ejemplo un reloj separado en todas sus partes no
tiene movimiento de las agujas, solamente cuando se le une para formar
el objeto reloj surge de él la característica de marcar las horas. Así
también la acidez del ácido nítrico no está presente ni en el hidrógeno,
ni en el nitrógeno ni en el oxígeno de los cuales está compuesto dicho
ácido. Solamente cuando estos tres elementos se combinan surge la
acidez, y esto es natural, y no dado por "el ser más ácido".
3.- En general.
3.1.- Pone en duda a Dios.
El
argumento parece indicar que Dios es como una luz, como la única luz de
un espacio cerrado donde todas las cosas estarán más iluminadas cuanto
más cerca de Dios están, negando dos atributos fundamentales que la
teología natural suele darle a Dios, los cuales son omnipotencia y
omnipresencia, el primero se niega en tanto Dios no tiene suficiente
poder para iluminarlo todo, y el segundo Dios parece no poder estar en
todas partes al mismo tiempo. De otra forma ese espacio cerrado sería
todo luz.
3.2.- La escala que usa Tomás de Aquino es arbitraria.
Tomás
de Aquino usa una escala que es arbitraria puesto que pone "lo malo" o
"lo ausente" abajo y "lo bueno" o "lo presente" arriba. Respecto a la
bondad, pone lo absolutamente bueno como lo máximo en bondad, pero
también podría darle la vuelta a la escala y decir que "lo bueno" es la
ausencia total de maldad, poniendo "lo absolutamente malo" como "lo
máximo". Si esto es así, Dios tendría que ser, por fuerza del argumento
"el ser absolutamente malvado".
3.3.- Hace una petición de principio ("petitio principii").
Pide
el principio al suponer que hay una máxima verdad (¿Dios?) y pide el
principio al suponer que la máxima verdad (igual al máximo ente), ya que
no sólo no lo demuestra, sino que esa es una confusión entre el plano
semántico (verdad) y el plano ontológico (ente).”
Contra-refutaciones:
IV-2.1.
La supuesta arbitrariedad que usted le atribuye, sólo demuestra su
miedo a los grados. El cero grados Kelvin es el máximo grado de frío o
máximo grado de no-calor.
2.2-Premisa invertida.
2.3-Ejemplos bobos fuera de lugar, sin valor filosófico alguno.
2.4- Sí se infiere del 5; otra vez, el ejemplo no demuestra algo.
3.2-Lo
de la duda es falso y su interpretación de la definición es errónea; lo
siento, aquí estamos ante una clara falacia “ad interpretationis”. El
arbitrario es usted, pues la escala de Santo Tomás de Aquino no presenta
errores. Su explicación es muy lógica, pues es cierto que el “mal es la
carencia de bien”, como lo explica él mismo. Dios—como ser perfecto que
es—no puede transmitir imperfecciones, por lo cual las imperfecciones
se explican claramente por la Ley del libre arbitrio, en el cual las
propias creaturas tienen sus limitaciones entitativas, lo cual se
explica por el misterio de la iniquidad, por lo cual la maldad sólo
puede darse en seres imperfectos; así, los humanos, como somos
imperfectos, tenemos maldad, aunque no somos totalmente malos. Cuanto
más bondad tenga una creatura, más elevado estará en la escala de la que
habla Santo Tomás y cuanto menos bondad tenga una creatura, menos
elevado se encontrará en dicha escala, acercándose al demonio; de ahí
que se diga que los ateos—en virtud de su negación a la existencia de
Dios, pese a que puedan ser muy buenos naturalmente, mientras que se
niegan a recibir la caridad sobrenatural—son “cerdos infieles”. Su
negación y ceguera intelectual, se traduce en un peligro inminente para
su alma, alejándose voluntariamente de su salvación; es decir que hay un
principio básico, que es el denominado “principio de la voluntad”. De
la misma depende nuestra salvación, pues el Magisterio infalible de la
Iglesia, indica que la salvación se da por: la FE y las obras; por ambas
a la vez. Las obras dependen de nosotros (“principio de la voluntad”),
mientras que la FE, es un don sobrenatural otorgado por Dios, pero a la
vez tiene un componente voluntario, pues se debe pedir al Señor que nos
aumente la fe.
“Quinta vía.
1.- Quinta vía - ordenamiento de las cosas, el argumento "Teleológico".
1.1.- Enunciación.
Pues
vemos que hay cosas que no tienen conocimiento, como son los cuerpos
naturales, y que obran por un fin. Esto se puede comprobar observando
cómo siempre o a menudo obran igual para conseguir lo mejor. De donde se
deduce que, para alcanzar su objetivo, no obran al azar, sino
intencionadamente. Las cosas que no tienen conocimiento no tienden al
fin sin ser dirigidas por alguien con conocimiento e inteligencia, como
la flecha por el arquero. Por lo tanto, hay alguien inteligente por el
que todas las cosas son dirigidas al fin. Le llamamos Dios.
1.2.- Simplificación.
Las cosas tienden a obrar según un fin o propósito (un "para qué").
Estas cosas no obran al azar.
Las cosas que no obran por sí mismas, alguna otra cosa las dirige.
Hay alguien que dirige todas las cosas.
Ese alguien es Dios.
2.- Refutaciones.
2.1.- Premisa 1 está indemostrada.
Que todas las cosas tienen un propósito, un "para qué" o teleología no está demostrado. Peor aún, es falso.
La
existencia de una estrella situada tan lejos de nosotros que está fuera
de nuestro horizonte de eventos de forma tal que nada de ella nos
afecta ni nosotros le afectamos en nada no tiene propósito alguno. En
razón del argumento tal estrella no existe, al menos para la ciencia,
pero suponiendo que sí existiera y no hay razón para pensar lo contrario
excepto su no observabilidad nos estaría diciendo que tal estrella no
tiene propósito alguno.
Somos nosotros, nuestra mente la que le da
propósitos a la existencia de las cosas y que en realidad las cosas por
sí mismas no tienen un propósito subyacente. Las cosas pueden existir
sin necesidad de un "para qué", somos nosotros quienes le aplicamos tal
cosa.
2.2.- Premisa 2 es falsa.
La premisa afirma que todo
tiene un orden aunque no veamos en apariencia ese orden "nada sucede por
azar". Mientras que el argumento completo quiere decirnos que el
Universo entero está ajustado perfectamente para un propósito, el de
Dios. Sin embargo esto no puede corroborarse empíricamente.
2.3.- Paso 3 no es una conclusión general.
Viola
el principio de razón, ya que de una consecuencia (que las cosas obran
siguiendo leyes y de manera ordenada) no se puede derivar legítimamente
el fundamento (un Dios con intenciones inteligentes) a menos que se
probara empíricamente la hipótesis en cuestión, algo que el aquinate no
hizo.
3.- En general.
3.1.- Implicación recíproca.
Tomás
de Aquino comente una falacia por implicación recíproca: vemos
propósito en las cosas luego las cosas tienen un propósito por lo tanto
las cosas tienen un propósito luego vemos propósito en ellas. A implica B
luego B implica A es inválido.
3.2.- Conclusión precipitada.
Que
las cosas se adecuen a un fin es un concepto metódico del cuál no
podemos inferir legítimamente algo que vaya más allá de los límites de
la experiencia. Pretender que porque las cosas se adapten a leyes
objetivas, luego un Dios más allá de este mundo las hizo es una falacia
de conclusión desmesurada, ya que la conclusión de un sumo hacedor
allende este mundo desborda los límites empíricos que permiten las
inferencias científicas. No podemos inferir la existencia de un Dios más
allá de este mundo con datos empíricos de este mundo, ya que no es
posible que estos datos nos informen sobre un hipotético metamundo
inalcanzable donde se encontraría Dios. También debemos tomar en cuenta
que los enunciados informativos o sintéticos, basados en datos fácticos,
por su naturaleza son particulares y de lo particular no podemos
inferir a Dios.
En otras palabras, Tomás de Aquino comete la falacia
de "el todo por las partes", al decir que como las cosas tienen
propósito, el Universo entero tiene propósito y ese propósito de lo
otorgó Dios.
Publicado por Diego Romero”
Contra-refutaciones:
2.1-
No necesita demostración, es evidente y se llama “principio de
causalidad” y por consiguiente, peor aún, es verdadero (peor para
ustedes). Ahora, ¿cuál es vuestro propósito? Ciertamente lo tienen, pero
es un misterio; todo lo que ocurre en el universo tiene un propósito y
ocurre por algo y para algo; esto no necesita demostración, es más,
demuéstreme usted lo contrario, si puede…El ejemplo que usted mismo
coloca sobre la estrella, no está igualmente demostrado, pero luego
usted admite—en parte—el “principio de la inteligencia”, es decir que
una inteligencia es la que le da propósitos a las cosas. Por ejemplo, el
hombre inventó el teléfono, pero no lo hizo porque sí, sino que le dio
un para qué, le dio un propósito (para comunicarse a distancia);
extrapolándose, lo mismo sucede con Dios, quien creó cada una de sus
creaturas con un propósito. No hay otra manera lógica de pensarlo, ya
que si las cosas no tuvieran un propósito simplemente no existirían, así
como es cierto que solamente es una inteligencia la que les da
propósitos a las cosas; por lo tanto, existe una Inteligencia Suprema,
que es la que les da el propósito a todas las cosas del universo.
2.2-
El falso es usted, pues la premisa 2 sí es verdadera; y lo es por el
simple hecho de que las cosas NO dependen en modo alguno del azar, pues
para que haya tal cosa, debe haber contingencia y ya le he demostrado
que Dios NO es una contingencia, sino una necesidad; Necesidad de la
cual dependen todas las demás cosas, por lo cual el azar es falso.
Ejemplo: si usted tira un dado, ¿usted realmente cree que el número que
va a salir es cualquiera, porque sí no más? No, dependerá de muchos
factores, estimado ateo; dependerá por ejemplo, de la manera en que tire
el dado.
Pero dejaré que un científico de verdad (yo sólo soy un
simple estudiante universitario y escritor), mi amigo de internet, el
Dr. Valmadian—honorable miembro de Hispanismo.org, Licenciado en
Ciencias Políticas y Doctor en Antropología Social—le explique esta
cuestión del azar:
“AZAR.
Usted, Sr "X" que se
autodefine como ateo es de los necesariamente convencidos de que si Dios
no existe, algo debe sustituirlo. Y ese "algo", como seguramente le
habrán enseñado por activa o por pasiva, es el AZAR. Y de aquí, sin más
preámbulos surge la primera de mis preguntas: ¿Sabe usted QUÉ es el
azar?
Seguramente si usted está leyendo estas líneas habrá
respondido inmediatamente "Pues claro que lo sé ¿qué se habrá creído
éste? Me parece que como me registre se va a enterar."
Si así
fuera, no me queda otra que volver a la pregunta: ¿sabe usted QUÉ es el
azar?. Y es que lo que pregunto es si sabe usted definirlo de acuerdo
con las reglas de la matemática que lo rigen, es decir, ¿si conoce usted
la Ley de los grandes números, enunciada por Jacob BERNOULLI,
continuador de PASCAL y FERMAT?
Y es que dicho conocimiento,
junto al de probabilidad, es absolutamente imprescindible para que usted
pueda aplicar el azar como parte de la explicación de la existencia del
TODO desde un prisma materialista. Y lo que planteo fundamenta este
principio esencial del azar en:
Ley de Laplace, que afirma que la
probabilidad de un suceso compuesto es la suma de las probabilidades de
los sucesos elementales que lo componen.
Por ejemplo, si se
trata de comprobar la probabilidad de obtener un número impar al lanzar
un dado de 6 caras: P (impar) = P (1) + P (3) + P (5) = 1/6 + 1/6 + 1/6 =
3/6 = 0'5
Al igual que en este sencillo ejemplo, todos los
sucesos elementales son equiprobables, es decir, tienen la misma
probabilidad de suceder, y se puede calcular la probabilidad de
cualquier suceso. Para ello hay que dividir el número total de sucesos
que incluye, o casos favorables, entre el número de sucesos elementales
del espacio muestral o casos posibles.
P(S) = nº de casos favorables/ nº de casos posibles
Partiendo
del principio que establece que "la materia ni se crea ni se destruye,
solamente se transforma y sabiendo que el número total de partículas que
componen el Universo es de potencia 10 elevada a 113 ¿podría usted
estimar CÓMO intervino el azar en la génesis de éste?
Estoy
totalmente seguro de que no puede. Por tanto, cuando usted afirma que
todo se debe al azar y no a la intervención de ningún Dios imaginario,
usted está expresando una opinión de fe materialista. Además, no debemos
olvidar que usted considera que todo está causado por el azar, incluida
la vida sobre la Tierra, es decir, todo a lo largo de 3.500 millones de
años aproximadamente, 35 millones de siglos.
Y, es que tanto
usted como los que mantienen posiciones similares, adoptaron ya hace
tiempo el recurso de pretender que el creyente en Dios aporte la carga
de la prueba. Y verá, la cuestión no es así ya que según la navaja de
Occam que tanto le gusta (por cierto, OCCAM era un fraile católico, ¿lo
sabía?) entre dos explicaciones posibles de un mismo suceso, la más
sencilla es la verdadera.
Pues resulta que la fe en Dios es
muchísimo más sencilla que los cálculos precisos para demostrar que el
azar es la causa de todo, infinitamente más sencilla.
Y ahora le
planteo una pregunta más, que es consecuencia directa de la anterior:
¿sabe usted como interviene la probabilidad en el azar? Y se imagina que
se lo voy a decir ¿verdad?, pues acierta usted.
Toda
probabilidad encierra una ley empírica, aunque también lógica, es decir,
metaempírica o metafísica, a la cual se somete al azar:
"En una
sucesión ilimitada de repeticiones de un fenómeno aleatorio, las
frecuencias de cada uno de los acontecimientos posibles, observados tras
cada repetición, se estabilizan hacia valores límites que son los que
se expresan mediante la probabilidad de cada acontecimiento."
Esto
quiere decir que, por ejemplo, en el lanzamiento al aire de una moneda a
medida que el número de veces que sea lanzada se incremente, la
frecuencia de las caras (o de las cruces, tanto da para el caso)
oscilará, de modo alterno, una y otra vez, primero a 1/4 y después a
2/3, en vez de presentar fluctuaciones como cabría esperar y que fueran
cada vez más pequeñas entorno a un valor intermedio, por ejemplo 1/2.
La
existencia de esas oscilaciones es totalmente ilógica, ¿cómo se puede
proceder a considerarlas? De ningún modo es esto posible, sólo cabría
repetir todo el experimento para comprobar que no se puede tomar como
algo empírico.
Y la razón de ello está en que el término
ilimitado (referido a series) o indefinidamente larga que se exige a
toda sucesión de repeticiones de un fenómeno, es una barrera
infranqueable para poder conocer la probabilidad del azar por
observación directa.
Y no hay una regla que sea universalmente
válida para poder prever la probabilidad de los acontecimientos
inherentes a toda posible variación de situaciones aleatorias que puedan
darse.
Me gustaría saber ¿cómo se resuelve este problema desde el razonamiento ateo del azar?
¿A
través de todo esto se demuestra la existencia de Dios? No, para nada,
pero si se demuestra que el argumento del azar es un IMPOSIBLE y que
carece de lógica alguna para constituir una explicación alternativa a la
existencia de Dios.
Y ahora viene la tercera de las grandes cuestiones: Dios y el Hombre.
Supongo
que no negará usted que el "Hombre" es todo un misterio. Ni azar, ni
evolución han explicado ese misterio hasta el momento. "Lo harán, seguro
que lo hacen, sólo hay que esperar, hay que dar tiempo al tiempo y
mantener la confienza en la capacidad científica de los investigadores."
Esta es una "respuesta-tipo" fácil de obtener de cualquier materialista
"leído". Pero mire usted, Sr. "X", es que esa respuesta la da quien
tiene fe, aunque sea en algunas ciencias, no es una respuesta empírica,
es decir, no es una respuesta científica.
¿Pero qué le pasa al
Hombre? Toda ciencia para prosperar necesita no sólo del método
empírico, resulta imprescindible plantear los problemas antes de
abordarlos. En otros términos, hay que delimitar el objeto, o sea QUÉ,
que abre un turno de preguntas epistemológicas: CÓMO, DÓNDE, CUÁNDO, POR
QUÉ, PARA QUÉ, QUIÉN... que sirven a la metodología como plantilla a
seguir. Así que podemos reflexionar sobre el Hombre en base a dichos
planteamientos.
¿Quién de entre los homínidos es hombre? ¿admite usted que aquél que es capaz de poseer y dominar el logos?
Pero ¿cuáles son las capacidades mínimas que reúne la racionalidad?
En
el hombre, la razón tiene tres dimensiones: razón técnica, razón
teórica y razón práctica. Lo que se traduce en técnica, lenguaje y
costumbres.
La capacidad de aprendizaje en el Hombre es
ilimitada, según afirmaba Anaxágoras, el nous o intelecto humano en
tanto que razón o logos autoconsciente puede aprenderlo todo, porque
puede comprenderlo todo ya que el logos no tiene naturaleza alguna y
¿cuál es la naturaleza de Dios?
Desde el punto de vista de su
naturaleza, el organismo humano es la expresión viva de la
inespecialización biológica, o si se prefiere de la indeterminación
biológica. A diferencia de todas las demás especies vivas de este mundo,
el ser humano en su aspecto biológico es deficitario.
Tan
deficitario que el Hombre carece de aparato fonológico especializado
alguno, las propias cuerdas vocales no tienen función lingüística, sólo
sirven para emitir sonidos guturales ¿Cómo es posible que hable?
Vuelvo al punto de partida: ¿el azar es capaz de hacer esto?, y... ¿también lo puede la evolución?
En
sus esquemas, ambas están indisolublemente unidas. Las preguntas no
terminan aquí, tengo otras preparadas, pero prefiero dar tiempo a la
lectura y crítica de mis planteamientos anteriores antes de volcar una
segunda parte.”
“2ª Parte
Y es que las grandes cuestiones
siguen necesariamente. La siguiente es una de las mayores incógnitas que
la propia Humanidad se ha planteado: ¿por qué y para qué estamos aquí?
Es
frecuente confundir el contenido de esta doble pregunta con otra que
formulada diría esto: ¿qué finalidad tiene la vida?, a la cual se suele
añadir esta otra: ¿es la vida un fenómeno exclusivo de la Tierra, o hay
otros lugares en el Universo donde se hayan podido desarrollar formas de
vida?
Ambas, siendo ciertamente importantes, resultan
intrascendentes para la cuestión planteada con anterioridad. Si la vida
ha surgido en cualquier otro mundo del Universo, sea en uno, en varios o
en toda una multiplicidad, desde nuestra galaxia hasta la más lejana
que podamos observar, es intrascendente porque sigue sin responder a ese
¿por qué y para qué estamos aquí? Más aún, con todas las posibles
formas vitales que se puedan, o quieran, imaginar, ya sean relativas a
las formas de vida más elementales, o a las más complejas, seguirá sin
responderse a la cuestión que nos ocupa.
Y aún más, incluso la
posibilidad de existencia de vida inteligente en uno o en miles de
mundos, no variaría en nada la situación de carecer de respuestas y no
afectaría en nada a las explicaciones teológicas y metafísicas. Tal como
apunté en otro hilo, hasta podrían dar fuerza a estas explicaciones.
Pero
volviendo a poner los pies en el suelo vemos que, a lo largo de toda la
historia geológica de la Tierra, o sea 4.500 millones de años, año
arriba, año abajo, (durante los primeros 1.000 millones la Tierra fue un
planeta estéril), con cambiantes condiciones climáticas, muchas veces
totalmente opuestas llegando a la glaciación total del mundo, así como
la deriva continental con todas sus consecuencias, y desde "el caldo
primitivo" hasta nuestros días, todo ello ha permitido el surgimiento,
desarrollo y extinción de millones de especies, es decir, ¿cuántas?, se
me antoja imposible saber su número pues de la mayoría no queda ni el
más mínimo registro, o prueba de su existencia, particularmente de las
más simples.
Y si nos atenemos a las morfologías de todas ellas,
incluidas las que jamás podremos conocer, y según se nos dice, es que el
ADN de todas nos informa que compartimos algunos rasgos, ¿entonces, por
qué existe una sola especie como la nuestra? Si observamos la
naturaleza veremos una multiplicidad de especies que perteneciendo al
mismo género, son perfectamente distintas. ¿Por qué con nosotros no
ocurre igual?
Yo tengo que rechazar las habituales explicaciones
evolucionistas, ya que no me sirven. En este contexto nos llevaría a
tener que reproducir textos por carecer de interlocutores, pero es que
no nos sirven, porque sería "marear la perdiz" ya que no responden a la
siguiente cuestión: ¿en base a qué proceso evolutivo surge el NOUS?
Supongamos
que alguien responde más o menos con algo similar a esto: "Lo hace
gracias al incremento de la masa cerebral y el desarrollo neuronal
consecuente. Bien, vale, pero eso es especulativo y escasamente
empírico. ¿Quién ha hecho mediciones del volumen y evolución del cerebro
de los homínidos y en qué circunstancias? Incluso desde las premisas
necesarias que proporcionasen que los estudios indirectos otorgarían
alguna certeza para obtener conclusiones, éstas serian somáticas y
seguirían sin explicar ¿qué es el NOUS?
Es decir, ¿por qué
habiendo habido otras especies homínidas, todas con rasgos somáticos
similares, sólo una y nada más que una, la especie humana a la que
pertenecemos, ha sido capaz de desarrollar el "LOGOS"?
Una
respuesta probable podría ser: Porque un proceso evolutivo civilizador
lo ha hecho posible. Vale, es hasta posible, pues así vendrían a
demostrarlo los casos de los "niños-lobo", el problema es que en tales
casos la existencia de la civilización
(sociedad+cultura+tecnología+lenguaje) es anterior a dichos casos. Pero
para los primeros "sapiens-sapiens" no había psicólogos evolutivos para
encauzar el aprendizaje del uso de sus utensilios y recursos, es decir,
no había ninguna civilización pre-existente, lo que significa que fueron
ellos los que iniciaron el proceso de inventar la civilización. ¿Y de
dónde surgió este impulso inexistente en otras especies de homínidos?
Hay que pensar que entre la aparición del homo sapiens-sapiens y las
primeras civilizaciones transcurrió muy poco tiempo, expresado en
términos geológicos, mientras que los hominoideos llevaban 4 millones de
años paseando sobre la superficie terrestre.
Incluso la cuestión
se la podemos adaptar al H. Neandertal, ¿por qué no fueron capaces de
desarrollar una civilización mínimamente estable superando la etapa de
la "horda"? Si lo intentásemos explicar desde la perspectiva
"evolucionista" habría que plantearse que estuvieron peor adaptados que
nuestra especie y no soportaron la presión y la competencia por el
acceso al alimento a las que los sometieron nuestros ancestros.
Pues
vuelta a la pura especulación: ¿acaso después de un periodo que oscila
entre los 300.000 y los 200.000 años no fue suficiente para que se
adaptasen?, otra, ¿ocuparon los mismos nichos ecológicos en todo el área
de difusión de ambas especies?, más para la meditación, ¿cuántos
sapiens sapiens había para representar un problema al neandertal? y,
¿acaso las investigaciones paleontológicas a través del registro fósil
no han demostrado que somáticamente su especie era mucho más fuerte que
la nuestra?
Así que volvemos al comienzo: ¿por qué y para qué estamos aquí?
Vámonos
de paseo al Cosmos y planteemos las grandes preguntas que cosmólogos y
astrofísicos siguen sin poder responder: ¿por qué existe el Universo? y
esta que es tremenda, ¿porqué es isótropo y homogéneo?, más todavía ¿por
qué es como es y no de otra manera?
Para quienes nunca hayan
oído hablar de términos tan raros, o que habiéndolos escuchado ni los
recuerden, "isótropo" significa que las cualidades que lo caracterizan
son las mismas en todos sus puntos, salvo algunas pequeñas fluctuaciones
y homogéneo porque observado por grandes áreas todas son iguales,
siendo las variaciones algo local. Además, se compone de los mismos
elementos y forma las mismas moléculas. Hay que añadir algo que mantiene
perplejos a los investigadores que lo expresan así: "se deja observar".
Prescindiendo
de Multiversos o Pluriversos, de los que no tenemos ni la más mínima
noticia, que no podríamos observar caso de existir, lo que ya es mucho
suponer, y que deja la cuestión en el terreno de "las creencias", y en
modo alguno dentro del campo de la Ciencia, hemos de centrarnos en lo
que sí vemos, medimos, calculamos, cuantificamos, es decir, en lo que es
empíricamente observable, pero acerca del cual no sabemos nada de por
qué y para qué está ahi.
Tenemos una doble incógnita, un doble
problema, y que además se plantean en los mismos términos. Hasta ahora
ni la mirada interior, ni la exterior, nos permiten responder a las
cuestiones fundamentales. Y es que todo ese bagaje de conocimientos
acumulados durante siglos no responde, no sirve, para responder a las
preguntas ¿por qué y para qué estamos aquí??
El materialismo es
absolutamente incapaz de responder a ello, todo lo más que hará será dar
respuestas que desglosadas no son sino falacias. Pero, ya hace tiempo, y
ante semejantes incógnitas irresolubles, surgió un intento de
respuesta. Una especie de fórmula que lo mismo vale para hacer un pan
que para hacer unas tortas: el Principio Antrópico.
Pero dada su
naturaleza polémica, enseguida surgió la discrepancia dividiéndolo en
dos interpretaciones principales: el Antrópico "fuerte" y el Antrópico
"débil"
Éste último nos dice que la vida humana está
interrelacionada con las propiedades del Universo en el sentido de que
puede surgir y evolucionar en cualquier parte si se dan las condiciones
adecuadas para ello. ¡Chocante! ¿Verdad? y completamente especulativa
pues hasta ahora no se ha encontrado a ninguna otra raza humana en el
espacio.
Y el "fuerte" lo que afirma es que el Universo es como
es y tiene los elementos que tiene porque fue "diseñado" así y para el
que Hombre pueda observarlo y admirarlo.
Pero esto no es sino una
fórmula de compromiso, una pretendida explicación que nada concluye. Y
es que todo tipo de explicación, con el paso del tiempo cada vez más
compleja, suele fallar, porque sigue sin responder a las grandes
cuestiones.
Y volvemos a la "Navaja de OCCAM" y debemos entender
que las cosas están planteadas del modo más sencillo. Y ello no es sino
la explicación que nos dice que hay un Ser Supremo, Creador que nos pide
que a través de nuestra capacidad del "LOGOS" entendamos su obra y lo
adoremos.
Esto que a usted Sr. "X" ateo le parece inconcebible,
no lo sería si entendiese y aceptase que la Ciencia no es más que
descubrimiento y observación de lo que ya existe, y que nosotros no
somos más que unos recién llegados, y siendo esto así de indiscutible,
más añadiendo el hecho de que el azar como causa es un imposible, no le
queda otra que reconocer la existencia de Dios.
Puede sustituir
si quiere la palabra por la de "demiurgo", o por cualquier otra
denominación, ¡allá cada cual con su conciencia! Pero lo que no se puede
hacer es sustituir el misterio de aquello a lo que nuestro intelecto no
alcanza con el argumento irracional del azar, y todo con tal de no dar
nuestro brazo a torcer.
Y ahora llego a la última gran cuestión:
¿y después QUÉ? Porque si tenemos un NOUS, o autoconciencia, y tenemos
un LOGOS y nos hemos planteado lo que he ido desgranando a lo largo del
texto, lo lógico es que nos planteemos el ¿qué pasa después del último
suspiro? Dicho de otro modo ¿para qué todo esto si después de unos años
hemos de diluirnos sin esperanza alguna de evitarlo?
Esto es muy
serio, esto no es ni una banalidad ni una frivolidad, tal como suelen
tomarlo muchos: "una vez muerto me da igual, ¿no me voy a enterar?" ¿De
verdad es este un argumento para ser tomado siquiera en consideración?
¿Por
qué no se plantea usted ¿cómo? querría que fuera su realidad después de
ese "instante final" ineludible e inapelable del que nadie puede
escapar. Al fin y al cabo, y siguiendo los argumentos que ustedes los
ateos suelen manejar, y dado que según ellos no hay prueba alguna, han
de tener por fuerza el 100 X 100 de convicción de que en el instante
final se habrá acabado todo, absolutamente todo y para siempre, no habrá
ningún después, ninguno. ¿No le aterra a usted esta idea? a mi me pone
los pelos de punta.
Pero nosotros los creyentes, en función de
sus propios argumentos, tenemos el 50% de esperanza de que no es como
ustedes lo plantean. Nosotros tenemos un 50 % de "síes" frente al 100 %
de "noes" de ustedes, lo que nos permite ver la vida de otro modo. Ahora
bien, le aseguro que se es muchísimo más feliz cuando ese 50 % que
algunos de ustedes están dispuestos a admitir, se convierte en la
consciencia de un SI al 100 por 100.
Hágase un favor: cierre sus oídos a los terroristas morales como Dawkins, no sólo le mienten, sino que le roban toda esperanza.
Saludos.”
Más
allá de algunos errores presentes en esa exposición, como lo del
supuesto de las “millones de especies” o los “millones de años de la
Tierra”, la misma está muy bien armada y explica muy bien el problema
del azar. Pero sigamos ahora, analizando las “refutaciones” de Diego.
2.3-
Falso, pues ciertamente las cosas que no obran por sí mismas, es porque
son dirigidas y eso NO viola el principio de razón, sino que al
contrario, decir lo opuesto, es lo que viola, ya que es cierto y
comprobado empíricamente—por más que Hume rebuzne—que una consecuencia
se deriva de su correspondiente causa, la cual en el caso de todas las
diversas consecuencias, sólo puede ser la Causa Primera de todas las
consecuencias habidas y por haber, que es Dios, el cual reitero, no se
puede probar empíricamente su existencia, al menos que se lo vea (cosa
que ya ha ocurrido muchas veces, pero los testimonios poseen el menor
grado de evidencia científica). Sin embargo, pese a mi paréntesis, el
Testimonio presente en el Evangelio (y el resto de la Santa Biblia) es
superior a cualquier otra erudición que existe sobre el universo, en
virtud de que es la Palabra de Dios. Esto es negado burdamente por el
ateo, el que alega que la Biblia simplemente es un “libro de cuentos”
inventado por el hombre, lo cual es falso y nosotros los creyentes lo
creemos por FE, así como ellos, por FE, creen lo contrario. Fe por fe,
me quedo con mi fe, que ¡oh casualidad! (nótese la ironía en eso, pues
en realidad se trata causalidad, derivada de mi voluntad e
inteligencia), es la verdadera, lo cual queda filosófica y
teológicamente demostrado de forma completamente racional y lógica, por
las irrefutables (pero siempre “rebuznables”; y perdón por el
neologismo, que me concedo el derecho, ya que el ateo Diego hizo unos
cuantos neologismos en sus “refutaciones”) Cinco Vías de Santo Tomás de
Aquino.
àEn general: Ciertamente Santo Tomás es un genio, yo soy
un hombre de inteligencia normal y Diego e Imaginario, son “rebuznadores
profesionales”, son unos bufones charlatanes y se los digo con todo
respeto, sin querer ofender.
Muestra Diego su falacia “ad
invallidus”, otorgando arbitrariamente invalidez a lo que no lo tiene,
pues si A implica B y ergo B implica A, NO hay razón alguna para
invalidarlo, por lo cual la implicación recíproca posee completamente
validez lógica.
3.2- Error rotundo, ya varias veces refutado, pues no
existe una “falacia de conclusión”. ¡Cómo a los ateos les gusta ver
falacias dónde no las hay! La “falacia del todo por las partes” es
inválida, pues ya expliqué lo de la Causa Primera y sus posibles
consecuencias. Si usted no quiere verlas, es problema suyo.
Lo
siento Imaginario, pero ni usted ni su amigo Diego, le pegaron ni una.
Pero no se preocupe, yo también no le pegaría ni una si intentara
refutar a las Cinco Vías de Santo Tomás de Aquino (sólo rebuznaría). El
hombre era un genio, nosotros no. Yo lo admito, pero lástima que vuestra
soberbia no se los permite admitir; por eso no comprendéis (“Comprende
para creer, cree para comprender” San Agustín de Hipona) Por último os
regalo un anexo, con otros rebuznos y sus correspondientes refutaciones.
Hágase clic aquí y luego aquí. No busco convencerlos de algo, pero una
vez en vuestras vidas podrían pensar por vosotros mismos y no seguir
como borregos las tonterías—de diversos tipos y en distintos grados—del
colectivo dominante; sabed que contra ese pensamiento único del Sistema
global judeo-masón-liberal-marxista, todavía queda la Santa Resistencia
de la Santa Iglesia militante; nuestra Iglesia está hace más de 2000
años y continuará hasta el final de los tiempos y no hay algo que podáis
hacer para detenernos. Como dice Billy Gates: “Si el dinero mueve
montañas, la FE puede más”. Yo os aconsejaría lo siguiente:
1. Primero piensen por ustedes mismos, desconfíen de todo y no llegarán a algo.
2.
Una vez alcanzado el “vacío”, llénenlo con la Verdad. Lean la
Biblia, comiencen por el Evangelio, luego el Génesis y el resto.
3.
Al leer eso verán cuál es la Verdad, quién es Dios (ahí van a
aprender realmente la definición de Dios, cosa que por sus rebuznos se
ve que no han entendido) y cuál es su Iglesia (otra cosa que por ahora,
ustedes no logran entender).
4. Ahí llegarán al dogma, se les
abrirán los ojos y verán la realidad. La iluminación viene de Arriba,
pues todo poder proviene de Dios, NO del hombre. Sean humildes.
5.
Y recordad: sólo un dogma combate otro dogma; la cuestión es saber
cuál dogma seguir y sólo uno—por principio de no contradicción—puede ser
el verdadero.
Finalmente con estas palabras culmino con mi
humilde y breve exposición, señor Roedor Imaginario. Que el Espíritu
Santo ilumine su alma, para que pueda ver la verdad; nuevamente le pido,
sea humilde; aún está a tiempo de salvarse. Saludos.
¡Obvio! ¡Gana el genio de Santo Tomás!
Fuentes:
La Santa Biblia (la católica, en español actual).
http://www.euskalnet.net/jcgorost/aviso/inicio_castell.html
http://www.maslibertad.net/religion/ideario/refutaciones.htm
http://www.taringa.net/posts/info/2884305/Refutacion-a-las-5-vias-de-Santo-Tomas.html
http://ar.answers.yahoo.com/question/index?qid=20100205141242AAc5nQs
http://ateismo.ws/articulos/filosofia/5vias.html
http://www.taringa.net/posts/offtopic/2031537/Critica-a-5-vias-de-Santo-Tomas-de-Aquino.html
www.driverop.com.ar/viastomistas.php
http://www.feyrazon.org/BarriolaProskauer.htm
http://imaginario-nopensar.blogspot.com/search/label/Las%20cinco%20v%C3%ADas%20de%20Santo%20Tom%C3%A1s%20de%20Aquino
http://ec.aciprensa.com/wiki/P%C3%A1gina_Principal
http://ec.aciprensa.com/wiki/Teolog%C3%ADa_dogm%C3%A1tica
http://ec.aciprensa.com/wiki/Fe
http://ec.aciprensa.com/wiki/Padres_de_la_Iglesia
http://ec.aciprensa.com/wiki/El_Mal
http://www.luventicus.org/articulos/03A002/agustin.html
http://es.wikipedia.org/wiki/Problema_del_mal
http://es.wikipedia.org/wiki/Fe_%28cristianismo%29
http://es.wikipedia.org/wiki/Fe_%28virtud%29
http://es.wikipedia.org/wiki/Fe
http://hispanismo.org/ciencia/13086-acerca-de-la-evolucion-el-azar-y-la-contingencia.html
http://hispanismo.org/ciencia/12356-cuestiones-para-ateos-preguntas-y-dudas.html
http://oigaamigonovenga.blogspot.com/2011/11/humor-anti-ateo-2.html