El gran error de los nazis: No percatarse que Adolf Hitler fue un francmasón

Desde SICARV: 

Adolf Hitler fue un francmasón

Adolf Hitler fue un francmasón.

Estoy escribiendo este artículo porque he leído las declaraciones de varios miembros de este foro alabando a Adolf Hitler. Algunos afirman que él era un católico. Algunos incluso van tan lejos como para jactarse de que acompañará al Hijo de Dios cuando regrese al fin del mundo. La forma en que alguien podría creer tales cosas, particularmente a la luz de la evidencia tan fácilmente disponible en Internet, me supera. Sin embargo, es cierto. Adolf Hitler es exaltado en todo el mundo desde un sitio web católico.

Eso sí, no creo en el “Holocausto” ni por un minuto. Aparte de la absoluta imposibilidad física de que ocurra tal evento, hay una cantidad abrumadora de documentación para demostrar que nunca sucedió. Como tal, no me pongo del lado de los que condenan a Hitler como un antisemita despiadado y sediento de sangre. Esta imagen no es más que una mentira. Aun así, no está lejos de la verdad. Como verá en breve, Adolf Hitler era masón. Y uno de alto rango. En otras palabras, él era un psicópata que adoraba al diablo. Pero no tome mi palabra, eche un vistazo a la evidencia. Todo lo que tienes que hacer es buscar “Apretón de manos de Hitler/Masón” en Internet. No hay escasez de fotos. Están todos allí en blanco y negro. Abajo algunas fotos: 

Por supuesto, algunos podrían argumentar que la similitud del apretón de manos de Hitler con la de los masones fue meramente accidental. Piensa lo que quieras, eso no cambia los hechos. Estos son apretones de manos masónicos. Si se realizaron deliberadamente o no, es otra pregunta. Ellos son claramente masónicos. Tampoco es ni remotamente lógico suponer que dos “élites” podrían accidentalmente, pero al mismo tiempo ejecutar un perfecto apretón de manos de libros de texto, una y otra y otra vez. Esta conclusión es ilógica.

Otros pueden querer argumentar que las fotos fueron de compras fotográficas, o manipuladas de alguna manera. Ciertamente es posible. Aun así, aquellos que mantendrían una posición así se verán obligados a responder por la sorprendente coincidencia de las acciones de Hitler en tiempos de guerra que se adaptan perfectamente al plan de los sionistas. De hecho, gracias a Hitler, las cosas no podrían haber sido más perfectas para el mundo “judío” después de la guerra. Primero, tenemos el engaño sobre el holocausto, que dio lugar a una orden de mordaza en todo el mundo a cualquiera que critique a los “judíos”, permitiéndoles actuar con inmunidad virtual en todas sus empresas. Luego, tenemos los cientos de miles de millones de dólares pagados a los “judíos” en reparación por la “persecución” que soportaron. ¿Y qué pasa con la creación del Estado de Israel? Dos mil años, los judíos han estado anhelando una patria. Finalmente lo consiguieron, gracias a Hitler. Qué casualidad. Es casi como si estuviera planeado.

Y esa es la pregunta, ¿no es... o “fue todo planeado”? ¿O fue solo una coincidencia asombrosa? ¿Cómo coincidieron las acciones de Hitler en tiempos de guerra tan perfectamente con los planes de los sionistas? Si él era masón, entonces tenemos que admitir que estaba actuando bajo las estrictas órdenes de sus maestros de títeres judíos. En otras palabras, si Hitler era masón, entonces todo lo que hizo fue planeado. Naturalmente, esto explicaría por qué sus acciones fueron tan buenas para el sionismo. Por otro lado, si mantenemos que todo fue sólo una coincidencia asombrosa, entonces nos vemos obligados a responder por el acuerdo de pre-guerra de Hitler (1933) con la Federación Sionista de Alemania para fundar una patria “judía” en Palestina. Ups. Está bien. Mucho antes de que empezara la guerra, Hitler firmó un pacto con los sionistas alemanes para ayudarlos a fundar una patria judía en Palestina. Se llamó el Acuerdo de Haavara o, más popularmente, el Acuerdo de Transferencia. La existencia de tal acuerdo es un hecho histórico. Hitler cooperó con los sionistas desde 1933 para comenzar el traslado de “judíos” alemanes a Palestina.

Y así, aquellos que sostienen que las acciones de Hitler sólo cumplieron accidentalmente el plan de los sionistas, se quedan rascándose la cabeza. Él estaba claramente en cooperación con ellos. De nuevo, es un hecho histórico. No hay coincidencia aquí. Tampoco hay ningún gran misterio. Las acciones de Hitler en tiempos de guerra coincidieron perfectamente con los planes del sionismo. Y entonces, tenemos que preguntar otra vez: ¿Estaba actuando bajo órdenes? ¿Fue todo planeado? ¿O fue solo una coincidencia asombrosa? Sin lugar a dudas, aquellos que afirman que fue solo una coincidencia, están en una negación descarada. No sé cuáles son sus razones. Tampoco me importa. Están cometiendo lo que los moralistas llaman “pecado contra razón”. O bien están completamente ciegos, o son francmasones, cuyo trabajo es desviar deliberadamente a los ingenuos alejados de la verdad.

Pero sea cual sea el caso, la verdad es lo que es. Los hechos son hechos, como dicen. Las fotos de Hitler que dan a sus miembros de la logia un saludo masónico sólo sirven para aclarar esos hechos. Él era un masón. Qué sorpresa. Por eso cooperó con los sionistas. Es por eso que sus acciones en tiempos de guerra coincidieron tan perfectamente con sus planes. Es por eso que Max Warburg, un conocido agente de los Rothschild, formó parte de la junta del Reichsbank de Hitler. Es por eso que los mayores contribuyentes financieros de Hitler eran afiliados de Rothschild en banqueros de Wall Street y Sionistas. Así es como, en menos de una década, Alemania emergió de la bancarrota completa para crear una máquina de guerra tan masiva que amenazaba la estabilidad del mundo. También es por eso que ninguno de los complejos de fabricación de la guerra de Hitler (plantas I.G. Farben) fueron tocados por los bombardeos aliados durante la guerra. Qué increíble coincidencia. Y la lista sigue y sigue...

Sí, Hitler era masón. Un peón dispuesto de los titiriteros judíos. Es por eso que todo salió como estaba previsto durante la guerra. Argumentar lo contrario es negación abierta de los hechos. Y así, al final, no puede ser elogiado como nada más que un asesino en masa psicopático que adora al demonio. Eso es todo lo que era. Como tal, no merece nada más que la condena más vil, y arder eternamente en los infernales fundidos del infierno. Y que su memoria arda con él.

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Opinión de Lord Stob: 

Aclaración: Nunca me gustó Adolf Hitler debido a su burdo socialismo, aunque sin embargo, hasta hace relativamente poco tiempo, creía que había sido un luchador sincero en contra de la judería internacional.

Si uno se lo pone a pensar bien, en realidad, ¡terminó ayudando a los sionistas! Hoy, todo Occidente idiota, se cree la mentira del holocuento. Es verdad que no por culpa de Hitler, pero no cabe dudas de que éste colaboró con el sionismo. El libro de Sutton, puede aclarar cualquier duda al respecto.

Lo que más me decepciona, no es la figura de Hitler, sino que figuras como Monseñor Tizo, Pavelic o incluso León Degrelle, en realidad también hayan sido francmasones. Por favor, Citreth, profundiza más sobre este tema, mostrando fotografías de ellos, haciendo el saludo masónico.  

Muy distinto por supuesto, fue el caso del fascismo y similares (Mussolini, Franco, Salazar), que sí fueron sinceros en su lucha contra el sionismo.

Finalmente, sobre la religión de Hitler (un asunto muy controvertido, incluso entre los propios nacionalsocialistas), es cierto que él fue católico hasta determinado punto de su vida; pero luego, se volvió apóstata, pagano o algo similar, ya que no se puede ser cristiano y a la vez “masón”, ni tampoco cristiano y a la vez “socialista”. Ambas posturas ya estaban bien condenadas por la Iglesia, en aquella época. Sí él hubiera sido honesto, no hubiera creado el “nacional-socialismo”, sino que se hubiera adherido al fascismo o creado el “nacional-capitalismo”. 

Ah, y otra cosa. Aquellos que dicen que el mundo estaría mejor si Alemania hubiera ganado la supuesta “Segunda” Guerra Mundial, claro, tienen razón… Pero es que no cabía esa posibilidad; ya estaba planificado milimétricamente por la masonería, para que Alemania (y el resto del Eje), perdieran a propósito esa guerra. El objetivo de ellos (los masones), era contribuir con la destrucción de la Iglesia Católica, atacar toda la Tradición, destruir a Occidente (demonizar a los conservadores/tradicionalistas), que los “judíos” quedaran como las “víctimas”, para que necesitaran de “reparación”, y para que, de paso, a través de una guerra horrible expulsaran a los palestinos de sus tierras. Además, precisamente los “judíos” del Israel actual son jázaros, mientras que quienes serían los verdaderos judíos bíblicos son los palestinos.

Por último, es un tecnicismo, pero mi posición es que la llamada “segunda” guerra mundial, en realidad fue la Quinta, porque ya habían ocurrido cuatro guerras mundiales en el mundo antes, es decir, cuatro guerras que tenían teatros de operaciones en distintos continentes y cuya influencia era mundial. Las guerras mundiales fueron, en realidad:

1.     Primera Guerra Mundial: Guerra de Sucesión Española (1701-1715).

2.     Segunda Guerra Mundial: Guerra de los Siete Años (1756-1763).

3.     Tercera Guerra Mundial: Guerras Napoleónicas (1803-1815).

4.     Cuarta Guerra Mundial o Primera Mentira Mundial: Gran Guerra (1914-1918).

5.     Quinta Guerra Mundial o Segunda Mentira Mundial: Segunda Guerra Mundial (1939-1945).

6.     Sexta Guerra Mundial o Teatro Frío: Guerra Fría (1945-1991).

7.     Séptima Guerra Mundial: Guerra contra el Terrorismo (2001-presente).

Actualmente estamos en la Séptima Guerra Mundial, que la comenzó Bush (otro masón) en 2001, con esa falsa bandera que fue el “atentado terrorista” contra las torres gemelas, perpetrado por “Al-Qaeda” (CÍA).

Yo pienso que por lo menos desde la Cuarta Guerra Mundial en delante, todas esas guerras son un engaño, y que ya estaban planificadas de antemano, quién iba a ser el ganador. Podría decirse que la última Guerra Mundial, en donde ganaron las fuerzas del bien, fueron las Guerras Napoleónicas (Tercera Guerra Mundial), cuando detuvieron al masón Napoleón y restauraron las monarquías católicas europeas, que él había intentado destruir.

He estado leyendo algo de Alfred Rosenberg; él fue el ideólogo del III Reich, una persona de tintes paganos y creencias protestantes.
Aquí va una muy interesante cita de este personaje histórico:

Alfred Rosenberg escribió:“El portador de la idea del Reich Alemán para nosotros no es Carlomagno, sino su adversario más enconado, el Duque sajón Viduquindo. El Sacro Imperio Romano de la Nación Alemana no es el escalón previo al Tercer Reich Nacionalsocialista, sino que los precursores de éste los vemos en todos los grandes rebeldes contra el primer Reich, ya sea que, como el inconcebiblemente grande Federico II el Hohenstaufen, actuasen en medio de una idea de la monarquía universal o se levantasen contra ella y se llamasen Enrique el León, Federico Guillermo de Brandemburgo, Lutero, Hutten, Federico el Grande o Bismarck.”

Fuente: "La lucha por nuestra concepción de mundo", p.12.

Como puede verse, para los nacionalsocialistas, el héroe de Alemania y de Europa, no era el bienaventurado Carlomagno, el fundador del Sacro Imperio Romano Germánico; sino su peor enemigo, el bárbaro PAGANO Viduquindo; ese hombre era un subversivo y un TRAIDOR, que luchó contra los francos.
También, como puede verse en el texto, quizás lo peor de todo: ¡¡¡Rosenberg alaba a Lutero!!!
Lutero es quien llevó la DESGRACIA a Alemania, porque por su culpa, ocasionó la Guerra de los Treinta Años, que dividió el Imperio entre católicos y protestantes. Por su culpa, por su gran culpa, Alemania NUNCA más en la historia volvió a ser la misma. Hasta hoy, Alemania sigue dividida espiritualmente.
Hitler, en lugar de unificar Alemania, supuestamente él diciéndose "católico", abrazó un falso "cristianismo positivo", diciendo que protestantes y católicos son lo "mismo", que ambos son "cristianos", cuando NO, los protestantes NO son cristianos. Esto es otra prueba más de que Hitler, no luchó por la verdadera unidad de Alemania, y así como Lutero, una vez más, llevó a la DESGRACIA de Alemania.
Primero Lutero, con la Guerra de los Treinta Años (1618-1648); luego Guillermo II de Hohenzollern (protestante), con la Cuarta Guerra Mundial (mal llamada "Primera"; 1914-1918); y finalmente Hitler (masón que se decía "católico"), con la Quinta Guerra Mundial (mal llamada "Segunda"; 1939-1945).